martes, 20 de octubre de 2009

Paro docente.


Es lamentable ver a la gente trabajadora tener que salir a la calle porque no alcanza el sueldo. Los gobiernos se han acostumbrado, a que se prenda esa luz roja, para ponerse en movimiento y considerar así un aumento. Y el pueblo en general se ha acostumbrado a las movilizaciones para "pedir aumentos de sueldo". El ciudadano que con su voto coloca a los gobernantes, luego para solicitar lo que le corresponde, debe rebajarse en actos callejeros, para llamar la atención.
Porque es verdad lo que dijo un dirigente gremial: "una vez que los políticos se instalan en sus despachos con aire acondicionado, se olvidan que están allí para servir y que fueron elegidos para administrar lo que le pertenece al pueblo, el BIEN COMÚN PÚBLICO.
Si es lamentable ver marchas, de distintos sectores pidiendo por mejoras laborales o salariales, mucho pero mucho más lamentable, es ver DOCENTES, pidiendo por un sueldo que alcance.
Recuerdo los años de mi infancia y adolescencia en que los maestros y profesores de la educación en general, eran un bien preciado. Los gobiernos cuidaban de ellos, pues en sus manos estaba el mismo destino de la patria, que se elaboraba en las aulas, EL FUTURO DE GRANDEZA DEL PAÍS.
La educación es un "derecho" de todo ciudadano. Pero en las últimas décadas ha sido degradado en esta nación.
Por empezar, y vamos a ser sinceros, aunque se dice pública, no todos los habitantes tienen acceso a ella; y los que sí, se encuentran muchas veces con docentes con muchas dificultades para sobrevivir. Digo esto porque no solo hablamos del sueldo, sino del respeto que padres y alumnos, le debieran dar, y que no sucede siempre. Sobre todo en los colegios que trabajan con los más pobres y marginales.
Por otro lado, ya no se tiene la misma visión del docente. ¡Y claro!. Si es totalmente ofensivo para la educación misma, verlos marchar con bombos y pancartas, sumándose a un verdadero carnaval; y que en los balcones de la Casa de Gobierno, los funcionarios contemplan desde lo "alto".
¿Falta voluntad política para resolver los problemas, o falta un líder que sepa discernir las prioridades? ¿Qué sepa que en las bases del desarrollo de los pueblos, el bien más preciado es la educación?
Finlandia este año fue elegida para el puesto número 1 entre todos los paises del mundo, por la excelencia en la educación. Los periodistas entrevistaron al funcionario responsable de la cartera educativa a su cargo. Le preguntaron que cambios habían realizado en los últimos años, para llegar hoy, a estar hoy en el primer puesto a la vanguardia del mundo. Respondió que no habían cambiado o reestructurado la educación, sólo habían invertido durante más de dos décadas en la "calidad educativa de sus docentes".
Para tener en cuenta, verdad?

No hay comentarios:

Publicar un comentario